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martes, 1 de noviembre de 2011

Héctor Veira

El Bambino luciendo diferentes casacas y peinados.

Cuando nos referimos a un doblecamiseteo "grosero", no podemos dejar de tomar como ejemplo a este personaje. Héctor Rodolfo Veira, más conocido como el "Bambino", es recordado por haberse cruzado de vereda de un día para el otro (y por muchas cosas más que ya sabemos) sin anestesia. Sus comienzos se remontan a San Lorenzo de Almagro, donde en el ´65 integraba el plantel junto a otro grupo de jóvenes, apodados los "carasucias". Sus buenas actuaciones le valieron la convocatoria a la selección, y como si fuera poco, llegaría a ser campeón del metropolitano de 1968 con el que parecía ser el club de sus amores. Lo que nadie se imaginaba, ni siquiera el más fanático del cuervo (ni tampoco del globo) que un par de años más tarde se cruzaría de vereda para jugaran en Huracán. Luego de haber confesado su amor por el club de Parque Patricios de antemano, más conocida como la gran "Ogro Fabbiani" (?), vistió orgulloso su camiseta, pero tan solo por un año, ya que con la gran marca de 21 goles en 45 partidos se ganaría un pasaje a México. En el ´73, con el humor y simpatía que lo caracteriza, volvió como si nada hubiese pasado a San Lorenzo, donde la gente si bien no lo odiaba, había quedado entre dolida y decepcionada por aquel cruce de vereda tan inesperado. Pero... ¿cómo enojarse con el personaje más carismático y gracioso en la historia del club, que además ganó un título tan ansiado como el del ´68? Imposible. Sigue y seguirá siendo un ídolo cuervo, aunque tenga una mancha negra en su historial como doblecamisetero consagrado.


(Por Coccia - Fcoccia@gmail.com)

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