Subscribe:

Ads 468x60px

Facebook

martes, 24 de abril de 2012

Julio César Cáceres



Hoy, una vez más, como cada martes y viernes, decimos presente con nuevos casos de doblecamiseteo. Después de analizar el famoso caso Ibrahimovich, hoy volvemos al fútbol argentino para mostrarles a este defensor sin pelos en la lengua, ni en las piernas (?), ya que a la hora de pegar tampoco era tímido. Duro, férreo, molesto, quitador incansable de pelotas (y piernas) pero con buena salida limpia por abajo, el mismísimo Julio César Cáceres, reconocido defensor paraguayo. Oriundo de San José de los Arroyos, Paraguay, hizo sus primeras armas en Olímpia, club que lo vio crecer en primera ganando un torneo nacional ('00), la tan anhelada Copa Libertadores ('02), y su respectiva Recopa Sudamericana ('03). Gracias a estos logros, muchos jugadores del plantel dieron el salto de calidad y emigraron a Europa, incluido Cáceres. Después de un paso bastante irregulares por el Nantes de Francia, y otro más irregular todavía por el Atlético Mineiro, se decide por radicarse en la Argentina y aceptar la propuesta del Club Atlético River Plate. Allí tomó la posta de la defensa rápidamente, ganándose el respeto de los hinchas y la cinta de capitán, pero lamentablemente esto duró menos que la dieta del Ogro Fabbiani (?) y a mediados de año emigro al Gimnástic de España. Después de deambular por la madre patria y pasar por Tigres de México, decide romper repentinamente su contrato (como lo hizo estando en River) y pasar a Boca Juniors, que aspiraba a armar un equipo de estrellas. Si esperaban que dijera que acababa de cometer un error imperdonable, una traición hacia los hinchas de River, que debería ser multado, castigado y juzgado socialmente, tienen razón. Lo concreto es que el paragua optó por su bolsillo una vez más y corrió hacia donde más le convino, claro, siendo extranjero poco le importó, pero si a los hinchas del equipo de Nuñez. Eso no fue todo. Su polémica decisión daría sus frutos porque en el segundo semestre, jugando para el Xeneize, consigue dos títulos más en su carrera profesional: la Recopa Sudamericana y el Torneo Apertura, en 2008. Así, festejó como si hubiera sido hincha de Boca toda su vida, pero eso tampoco fue todo: después de haber hecho la pretemporada, a 3 días de empezar un nuevo torneo, priorizó nuevamente su bolsillo y volvió a romper contrato, para volver a pasar al Atlético Mineiro. Doblecamisetero, egoísta, ventajero y quebrador de tobillos ilusiones (¿no será mucho?), breve pero tormentosa fue su carrera en el fútbol argentino. Cuando volverá no lo sabemos, pero de lo que estamos seguros es que si se da, lo hará con el paraguas bien abierto de antemano... (?).

viernes, 20 de abril de 2012

Zlatan Ibrahimovic

  Zlatan haciendo lo que mejor sabe hacer: meter goles y vender humo(?)

Después de nuestro regreso a todo trapo(?) con el post de Santiago Hirsig, hoy les presentamos otro caso de doblecamiseteo en el fútbol extranjero: el de Zlatan Ibrahimovic, el sueco que jugó en los 2 clubes de la ciudad de Milán y que supo ser figura y consagrarse campeón con ambos.
Su debut como futbolista se produjo en el equipo sueco Malmö FF en el año 1999 y por sus buenas actuaciones fue rápidamente transferido al Ajax holandés en el año 2001.
Luego de 3 brillantes temporadas en el Ajax con golazo al NAC Breda incluido, es comprado por la Juventus en el 2004, equipo en el que se mantuvo solo por 2 temporadas, ya que abandonó el club luego de que la Juve fuera condenada a jugar la Serie B por arreglo de partidos.
Pero ahora, luego de esta introducción, vayamos a lo que realmente nos interesa, el doblcamiseteo de Zlatan.
El sueco llegó al Inter para la temporada 2006-2007, donde por su capacidad goleadora y su muy buena técnica (pese a su 1,95 de altura) se convirtió en uno de los baluartes y figuras del Neroazzurro, club en el que permaneció hasta la temporada 2008-2009. Allí se consagró campeón de la Serie A 3 veces consecutivas llegando a ser el máximo goleador en su última temporada, lo que le valió su pase al mejor club del momento (y de la actualidad), el FC Barcelona. Del Inter se despediría con un registro de 117 partidos jugados y 66 goles anotados.
Luego de su frustrado pase por el club español y de su supuesta pelea con Pep Guardiola, Zlatan quería cambiar de aire y fue en ese momento cuando el Milan se cruzó en su camino y él, pese a su pasado en el otro equipo de esa ciudad, aceptó sin problemas, importándole poco y nada lo que Piqué los hinchas del Inter sentían por él, aunque en su última etapa en el Neroazzurro su relación con la afición no era del todo buena. Llegó al Rossonero para la temporada 2010-2011 y hasta el día de hoy se mantiene allí. Sus buenas actuaciones y su olfato goleador interminable hicieron que los hinchas del equipo de Berlusconi se olvidaran rápido de su paso por el Inter. Hoy en día es el delantero más importante junto a Maxi López(?), ídolo y figura del club, donde lleva 74 encuentros disputados y 50 tantos convertidos y donde ya se consagró campeón de la liga italiana.
Así termina esta historia, la de un jugador que para poder retomar su buen nivel se atrevió a clavar ese puñal por la espalda que tanto duele en el mundo del fútbol, aunque se sabe que eso no es lo único que sabe clavar por atrás(?).


martes, 17 de abril de 2012

Santiago Hirsig

   Hirsig (bañado) en su salsa: riendo en uno, dejando la vida en el otro...

Sí, al fin hoy, después de un merecido receso estival (?), llega una nueva entrega de DobleCamiseta. En esta oportunidad, el elegido que no podíamos dejar pasar, es ni más ni menos que Santiago Hirsig, aquel mediocampista cuya melena al viento nos hacía ilusionar con el estereotipo del habilidoso, cuyo corazón pertenece a un solo escudo, a una sola hinchada. Pero claro, no tardamos mucho en refutar esa teoría. Después de debutar en Atlanta por el '99 y tener un breve paso por Platense en el '01, optó por pegar un salto de calidad y se unió a las filas del C.A. Huracán, con poca repercusión y casi nula expectativa. Y con razón, ya que disputó la temporada '02/03 con irregularidad, y terminó dejando el club de Parque Patricios en busca de minutos de juego. Después de pasar dos temporadas en Arsenal de Sarandí, donde tuvo buenos momentos, San Lorenzo de Almagro, a pedido del DT Oscar Ruggeri, lo vio con buenos ojos para poblar el mediocampo. Ahí se produjo el hecho que debería estar penado por ley para todo futbolista, el puñal por la espalda, sí, lo peor que se puede hacer en dicha profesión: Doblecamisetear. Esto obviamente le valió el desprecio de los hinchas de Huracán (que no son vergonzosos a la hora de recordárselo) pero tal vez fue la decisión más acertada de su vida: en la temporada '06/07, ya con Ramón Díaz como DT, el club de "Boedo" (eso creo…(?)) pudo campeonar con mucha autoridad, terminando Hirsig como uno de los referentes del plantel, y con tan solo un gol convertido en ese torneo. Quien diría que una traición de tal magnitud sería premiada por el destino y se consagraría en la máxima categoría del fútbol argentino.
Lamentablemente esto no quita que quede en la lista negra de Doblecamiseteros en la historia del fútbol argentino, una mancha que llevará toda su vida y recordará cada vez que camine, ya sea por Parque Patricios o por uno de los tantos barrios cuervos.